La calificadora Fitch confirmó este miércoles la nota soberana de México
en “BBB-/perspectiva estable”, en reconocimiento de la política macroeconómica
prudente, finanzas externas robustas y la diversificación de la economía. Esto
significa que la calificación crediticia del emisor soberano, se encuentra en
el nivel más bajo del grado de inversión y no hay riesgo de sufrir una
degradación o recorte en un lapso de 6 a 12 meses. En un comunicado admitieron
que la nota se encuentra limitada por el crecimiento económico “moderado” de
largo plazo, indicadores deficientes de gobernanza, desafíos fiscales
relacionados con una baja base de ingresos; rigideces presupuestarias, así como
por los pasivos contingentes de Pemex. De hecho, ajustaron de nuevo su
expectativa para el PIB de México y ahora anticipan que la economía mexicana
registrará una contracción de 0.4% este año y apenas conseguirá un crecimiento
de 0.8% para el año 2026. En el comunicado reconocieron que “México es
especialmente vulnerable al proteccionismo comercial de Estados Unidos ya que
las décadas de integración que tiene con su vecino del norte han convertido a
las exportaciones en un pilar de su economía”. Refirieron que en el año 2024,
las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos representaron el 27% del PIB. De
manera que consideran que “los aranceles impuestos podrían tener impactos
significativos especialmente en el sector automotriz y la incertidumbre que
está lastrando la actividad económica”. En el comunicado resaltaron que “aún si
la política de Estados unidos preserva un trato preferencial para México
respecto de sus competidores, las perspectivas son menos favorables para el
nearshoring mientras persista la incertidumbre”.